Fernando Corbo/ El regalo de Andrea
Un televisor que ha dejado de funcionar hace algunos años y del cual el artista nunca quiso desprenderse fue cubierto posteriormente con láminas de oro a modo de homenaje. Este objeto modificado y resignificado requiere ser congelado en el tiempo tanto por su fuerte valor afectivo como por esa negación al olvido y a la perdida. Este objeto, regalo de su hermana hoy fallecida, ha pasado de su uso cotidino a transformarse en un símbolo tanto de aquello que fue como aquello que no queremos que se vaya.